LAS MARCAS Y LA ENSEÑANZA

Los anuncios en escuelas y universidades

El texto “Las marcas y la enseñanza” nos comenta la influencia de las marcas en las escuelas y universidades estadounidenses y canadienses, siendo éste, el último sitio donde les quedaba por introducirse. Lo han realizado a través de anuncios, equipaciones deportivas, comida en los comedores, dispensadores de bebidas.

Me ha sorprendido bastante el texto, el ver hasta que punto llegan escuelas, universidades e incluso profesores, con tal de obtener recursos económicos, ya que en Estados Unidos parece ser que la financiación que obtienen del gobierno no es suficiente.

No creo que sea lo más adecuado, que la publicidad entre en las escuelas, convirtiendo así a éstas en un mercado, y se eduque a los alumnos a ser una sociedad consumista y no liberal.

Aparte de todo esto, en Estados Unidos se está creando una escuela clasista, ya que los alumnos más desfavorecidos económicamente, no pueden optar a comer las mismas cosas que el resto, sólo porque no pueden comprar una hamburguesa o pizza que no sea de Pizza Hut o un Big Macs, ya que estos productos son el doble de caros que los de la cafetería y encima las cadenas prohíben “versiones genéricas”.

 

Otro de los inconvenientes, es que la escuela obliga a los alumnos el consumo de esas marcas, sin dejarles libertad de elección, sólo por la firma que los centros tienen con las empresas, ya que como comenta el texto en un centro de Georgia, se realizó el día de la Coca-Cola y un alumno fue expulsado por llevar una camiseta de la marca Pepsi.

Luego está el prohibir, a los alumnos y miembros del colegio, la libertad de expresión, porque marcas, como Nike o Reebok, les ofrezca sus equipaciones y estos las utilicen, no pueden emitir ningún mal comentario sobre ella. Creo que si un producto no es bueno hay que decirlo y que las marcas tomarán esto como una ayuda de mejora. Porque por una parte veo beneficioso que las grandes marcas equipen a los grupos deportivos de las escuelas, pero no que los repriman.

Como maestros creo que no deberíamos permitir esto, hacer que las escuelas sean un mercado y que desde edades tempranas entren en la etapa de consumismo. En vez de gastar tanto dinero en consumir y promocionar, que se gaste más dinero en crear, investigar e inculcar la educación.